Reseña: La huida

Novela distópica, un gobierno absolutista y una chica con lo que parecen serios problemas. Tenía claro que necesitaba saber cómo iba a suceder la cosa y, sinceramente, no me ha decepcionado nada.

Jenna está cumpliendo condena en Mileway, una famosa cárcel de alta seguridad para los delincuentes más peligrosos, por haber asesinado a sus padres. Después de haber sufrido el maltrato de sus compañeros, ya que al ser la única chica (y además muy joven) era el centro de todas las amenazas, ha aprendido a defenderse tanto física como verbalmente. Un día cae enferma y mientras está descansando en la enfermería, se desata un botín en la cárcel. Pero entonces sucede algo que no espera, y es que su médico la ayuda a escapar. ¿Por qué? Es lo que tendrá que descubrir. Pero como la ACID, que es una especie de cuerpo de policía que gobierna el Reino Unido desde hace más de medio siglo, tiene un estricto control sobre toda la población, tendrá que conseguir una identidad y una cara nuevas y así comenzar de nuevo. Todo se complicará en más de una ocasión, sobre todo cuando tropieza con Max, el hijo del doctor que la ha ayudado a escapar, y ambos tendrán que huir de la ACID, embarcándose en una aventura que ayudará a Jenna a descubrir muchas cosas sobre ella misma, entre ellas su verdadera identidad.

Volvemos a un mundo distópico y con un gobierno tirano que controla a su población, hasta eligiendo a sus parejas o compañeros vitales. ACID establece los límites y es que la RIGB (República Independiente de Gran Bretaña) está completamente aislada del mundo. Impone su voluntad a la población, encarcela a cualquiera que hace un mínimo movimiento erróneo, y modifica la verdad a su favor. Es decir, juega sucio. Por eso Jenna, en su huida, tendrá que saltar más de un obstáculo y burlar a la ACID una y otra vez. Sólo quiere permanecer a salvo, y vivir su vida tranquilamente.

Puede que estéis hartos de distopías y cosas así, pero os puedo asegurar que este libro no os defraudaría. Al menos conmigo no ha sido así. Hay acción, y aunque en algunos momentos hay una ligera sensación de calma, enseguida vuelven a aparecer los problemas para Jenna y ésta tiene que salir corriendo. El ritmo al final del libro me pareció trepidante ya que nuestra protagonista se mete, ya consciente, en la propia boca del lobo. Os podéis imaginar mis caras y mi angustia cuando iba leyendo el final en el tren, quería gritar y morderme las uñas porque no tenía ni idea de cómo iba a salir de apuros. Y eso ha sido así prácticamente durante todo el libro, que además tiene giros que no me esperaba para nada y, aunque hay romance, no hay triángulo amoroso, pero peca un poco de “amor instantáneo”. No obstante, lo dejo pasar porque me ha terminado convenciendo y se desarrolla bastante bien.

La narración también es muy ágil y amena, y ayuda a engancharte a la historia desde el principio. Esto me ha sorprendido bastante porque, por lo que parece, es la primera obra de la autora (quien publicará un nuevo libro en 2014. Podéis ver esta información pulsando aquí). La historia está narrada en primera persona del presente, desde el punto de vista de Jenna, de manera que seguimos de cerca sus inquietudes y preocupaciones. Aunque al principio hay cosas que no entendemos, enseguida se nos explican y aclaran y en ningún momento entorpecen la lectura. Además, y como puntos positivos, es un libro único y está en formato “bolsillo” con solapas, y su precio es el que veis en la ficha de arriba, que para lo que estamos acostumbrados a ver por aquí, está muy bien.